BUENOS AIRES (AP). Es el cielo o el infierno y la desgracia de uno es la alegría del otro. Cuando juegan River Plate y Boca Juniors no hay término medio.
Pero toda la atención estará puesta en el superclásico que se jugará en la cancha de River, que llega a este duelo con apenas seis puntos sobre 27 en juego. Boca está mejor con 14 y sólo lo separan cinco de San Lorenzo.
River y Boca tienen sus defensas entre las más vapuleadas y sus ataques no son un dechado de virtudes.
En un River-Boca no hay estadística ni pronóstico que valga, ya que la historia indica que el que llega como favorito suele terminar vapuleado. Y como es un campeonato aparte, sus hinchas sólo quieren ganar para "salvar" el año, aunque sea con un gol con la mano.
"Hay que ganar cueste lo que cueste", fue la demanda de los hinchas de ambos equipos durante los partidos de la fecha anterior, cada una de ellas haciendo alusión a River o bien a Boca.
En un River vs Boca o "Millonarios" vs "Xeneizes" poco interesa la estrategia. Se le da más importancia al fervor.
"A Boca hay que jugarle con el corazón", dijo el técnico de River, Leonardo Astrada. "Lo único que importa es el triunfo. Es una historia aparte...Ganarle a tu eterno rival".
En River jugarán veteranos de mil batallas como Ariel Ortega y Marcelo Gallardo y otro tanto harán en Boca Sebastián Battaglia, Juan Román Riquelme y Martín Palermo.
Curioso caso el de Riquelme-Palermo, desde hace tiempo entre las mejores duplas ofensivas del fútbol argentino: fuera de la cancha apenas se hablan porque no se llevan bien, pero dentro de ella parecen amigos de la infancia.
"Los dos remamos en el mismo barco", dijo Palermo. "No tengo porqué ser amigo de Román... Mi enemigo es River, no un compañero".
Cerca de 55.000 personas estarán en el estadio, entre ellas periodistas de Alemania, Francia, Serbia, Dinamarca, Brasil, Uruguay, Chile, Colombia, Ecuador, Venezuela, Italia, España, Estados Unidos y de la cadena Al Jazeera, dijo la oficina de prensa de River.
"Si le ganamos a Boca tendré la mejor alegría del año", dijo por el centro de la ciudad Marcelo Ingaramo, de 33 años, empleado bancario y declarado fanático de River.
"Ah, me olvidaba", agregó. "La otra alegría fue el nacimiento de mi hijo Fabián en marzo pasado".
Sobre 184 partidos jugados, Boca ganó 67 y River 56.
"Como siempre en la historia, me imagino que nos vamos a sacar chispas", subrayó el volante de River, Matías Almeyda. "Todos los clásicos son así y este no será la excepción".
Los otros partidos son: Estudiantes-Atlético Tucumán, Rosario Central-Independiente (viernes): Banfield-Godoy Cruz, Chacarita-Huracán, Racing-Lanús, Vélez-Newell's (sábado), Arsenal-Gimnasia, Tigre Argentinos Juniors (domingo).
FUENTE: Agencia AP