FÚTBOL Fútbol - 

Chelsea venera a Mourinho a pesar de no ganar nada

LONDRES (AP). José Mourinho es tal vez el único técnico que puede pasar un año sin ganar trofeos con Chelsea... y sin que nadie pida su cabeza.

Qué diferencia con el trato que se le dio a Rafa Benítez y a sus otros predecesores. El español sacó al club campeón de la Liga Europa el año pasado. La hinchada, no obstante, no le dio la menor trascendencia a ese título y contaba las horas para que volviese el portugués.

Benítez había reemplazado a Roberto di Matteo, despedido inmisericordemente poco después de darle a Chelsea su primera y única Liga de Campeones

Pero pareciera que nada puede afectar la devoción del Chelsea por Mourinho, que se ganó el corazón de los hinchas en su primer paso por el club, del 2004 al 2007, un período plagado de trofeos nacionales, incluidos los de la Liga Premier del 2005 y el 2006.

Ni el fútbol aburrido que hizo el equipo, ni sus peleas con los árbitros ni sus críticas públicas a sus jugadores.

Mourinho sabe que se le perdona todo, al menos por ahora. Y no se cansa de decir que Chelsea es algo especial para él.

"Tuve muchas oportunidades de tener cuentos de hadas, y decidí no tenerlos", dijo Mourinho. "Si quisiese ganar ligas con facilidad, elegiría otras ligas. Elegiría un club que está en una situación que no es la situación actual de Chelsea. Elegí con el corazón cada aspecto del club que quiero, el club que amo, una competencia que me encanta, una ciudad en la que me gusta mucho vivir".

En otras palabras, Chelsea debería sentirse agradecida de que volvió.

El dueño de Chelsea Robert Abramovich, que terminó muy peleado con Mourinho luego de su primer paso por el club, cedió a las presiones de la hinchada y lo trajo de vuelta. En los seis años que pasaron antes del regreso del portugués, siete técnicos desfilaron por el club.

Mourinho declaró a la BBC que "Chelsea tuvo una década fantástica, pero ese equipo está desapareciendo, paso a paso". Agregó que este es un momento de transición y de recambio de jugadores, en el que "algunos (de los que participaron del ciclo) ya no están aquí, otros tienen cierta edad y los jóvenes están empezando el proceso".

El capitán John Terry, Ashley Cole y Frank Lampard, cuyos contratos vencen en las próximas semanas, se mostraron muy emocionados al dejar el terreno de juego el domingo en el último partido de Chelsea de local y no es seguro que vuelvan.

Mourinho quiere un goleador, en lo posible Diego Costa, del Atlético de Madrid, que garantice que no vuelve a suceder lo de esta temporada, en que Samuel Eto'o marcó 14 tantos, Fernando Torres 10 Demba Ba ocho. En total, el trío de atacantes deparó 32 goles, comparado con los 30 que anotó Luis Suárez para Liverpool.

"No tenemos un delantero que pueda manejarse en espacios reducidos, hacer una jugada, un gol, abrir las puertas", sostuvo.

Mourinho podría poner a prueba el cariño que le tiene la hinchada desprendiéndose de Eden Hazard, probablemente el mejor jugador del club esta temporada pero que criticó la táctica defensiva de Chelsea en algunos partidos. Este año vendió a Juan Mata, el mejor jugador del club las dos temporadas previas, al Manchester United, renunciando a un volante ofensivo creativo.

¿Extraña el equipo a Mata? Curiosamente, Chelsea tiene problemas con los equipos pequeños, pero no con los grandes. Le ganó dos veces a Liverpool, superó 6-0 a Arsenal en casa y le empató sin goles afuera, y tiene una victoria sobre Manchester City.

___

Rob Harris está en Twitter como www.twitter.com/RobHarris

FUENTE: ROB HARRIS (Associated Press)