MEXICO (AP). En sus primeras palabras cuando inició su segundo ciclo como técnico de México, Javier Aguirre dijo que no era un superhéroe. Hoy, en México, la afición no dudaría en ponerle la capa.
México podría lograr su pase a Sudáfrica 2010 con una victoria ante El Salvador el próximo sábado, apenas siete meses después de que el sueco Sven-Goran Eriksson fue cesado por los malos resultados que ponían a México en una posición muy comprometida rumbo a la clasificación.
"En el aspecto anímico ha habido una evolución, una mejoría. Cuando llegué se sentía el ambiente enrarecido, con la autoestima baja de parte de los jugadores, poca credibilidad en el grupo, mucho pesimismo en el entorno", reconoció Aguirre.
La vez anterior que el "Vasco" llegó al rescate de México fue en el proceso eliminatorio para Corea-Japón 2002.
"Hoy veo un entorno más apacible, a directivos que confían en su selección, a una afición que cree posible que su selección esté en el mundial y unos medios de comunicación acordes con las circunstancias. Señalando lo que ven, sin agregar más tinta de la que requiere el equipo", añadió Aguirre.
El defensor Rafael Márquez comentó que la contratación de Eriksson fue un error por no conocer a fondo el fútbol mexicano.
"La llegada de Javier ha cambiado el rumbo de todo y ha sido muy bueno su arribo a la selección ... Confiamos en su trabajo y hay que tratar de culminarlo", afirmó Márquez.
Y aunque hoy todos son halagos, Aguire pasó momentos críticos. En su primer partido como nuevo estratega, México no mostró progreso alguno y cayó ante El Salvador y luego venció apuradamente 2-1 a Trinidad y Tobago en el estadio Azteca. La prensa local fue feroz en sus críticas y le cuestionaban si todavía tenía los arrestos necesarios para clasificar a México.
Aguirre hizo caso omiso a los comentarios. Sabía que había tenido poco tiempo para trabajar y la Copa de Oro le presentaba la ocasión única de tener a sus jugadores juntos durante casi 45 días. Sólo llamó a tres "europeos": Guillermo Franco, Giovani Dos Santos y Carlos Vela y usó el talento local para ganar el torneo goleando a Estados Unidos en la final.
Ese triunfo, ante el equipo alterno de Estados Unidos, no cambiaba mucho las cosas en la eliminatoria, pero cuando el 12 de agosto Mexico doblegó a los estadounidenses 2-1 y luego derrotó a Costa Rica y Honduras consecutivamente, el panorama se transformó. Del infierno a la gloria en sólo tres encuentros.
"No hemos tenido respiro desde aquella tarde en el Cuscatlán en que se complicaron aun más las cosas", reflexionó sobre su debut. "Hemos vivido la eliminatoria al día y estos últimos cuatro partidos los hemos superado al límite, no había mañana y el sábado no lo hay".
Cuando restan dos fechas en el calendario regular, Estados Unidos encabeza la eliminatoria con 16 puntos, uno más que México, mientras Honduras viene detrás con 13 y Costa Rica con 12. El Salvador todavía vive con ocho unidades y Trinidad y Tobago ya está eliminado con cinco.
"Tenemos pensado que los 180 minutos que vienen son a muerte. Si somos capaces de conseguir tres puntos matemáticamente estamos en el Mundial", agregó el estratega. "Hablamos de 18 puntos, que era una cifra que históricamente es suficiente, tenemos 15, no nos alcanza. No estamos en el Mundial necesitamos tres puntos. ¿Cómo? Como sea. Ojalá dando espectáculo".
México busca su quinto mundial en fila. Desde que se instauró el formato de un hexagonal final, México se ha clasificado con 18 puntos a Francia 1998 y Corea-Japón 2002 y con 22 a Alemania 2006. Ahora su cifra máxima serían 21 unidades.
FUENTE: Agencia AP