EL CAIRO (AP). Seis países latinoamericanos llegaron al mundial sub20 en Egipto. Sólo uno de ellos empacó las maletas después de la primera ronda.
Fue un desenlace triste tras un arranque promisorio: una victoria 3-0 sobre Hungría, su primera en un mundial juvenil desde 1977.
Sin embargo, la delantera hondureña tuvo la pólvora mojada en sus dos últimos encuentros, que perdió 1-0 y 2-0, y el plantel se vio aquejado por problemas de disciplina para despedirse temprano del torneo.
"Fallamos mentalmente y no estuvimos a la altura del reto", reconoció el técnico hondureño Emilio Umanzor.
Honduras tenía uno de los grupos más accesibles del campeonato _con Hungría, Emiratos Arabes y Sudáfrica_ y tras vencer al favorito en su debut todo apuntaba a que se clasificaría a la segunda etapa.
Un empate en el último partido le bastaba a los centroamericanos para meterse en los octavos de final.
"No voy a poner excusas por lo que pasó, porque las excusas son para los que no pueden aceptar la culpa. Yo soy el responsable por lo que sucedió y acepto la culpa", indicó Umanzor.
Sostuvo que los jugadores hondureños tienen que aprender a lidiar "con lo bueno y lo malo".
Honduras también se vio afectado por un caso de indisciplina antes de perder 1-0 contra Emiratos Arabes en su segundo duelo.
Umanzor indicó que algunos miembros del equipo llegaron al hotel tarde por la noche y los jugadores se despertaron
"No estoy poniendo una excusa, pero nuestros preparativos fueron un poco problemáticos", señaló.
FUENTE: Agencia AP