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Perú cierra su Mundial con papel discreto en maratón femenino

Las peruanas Clara Canchanya, 26ª en el maratón del Mundial de atletismo de Pekín, y Hortensia Arzapalo, que se retiró por lesión hacia el kilómetro 30, no pudieron superar el 19º puesto obtenido por Ena Guevara en la misma prueba en 1991, este domingo en el último día del evento.

A Canchanya le queda el consuelo de haber sido la primera clasificada entre las fondistas latinoamericanas que participaron en la prueba, siendo la segunda la brasileña Roselaine Benites (47ª con 2h49:28) y la tercera la cubana Dailín Belmonte (51ª con 2h56:18).

Canchanya terminó con un tiempo de 2 horas, 39 minutos y 24 segundos en una carrera en la que la etíope Mare Dibaba ofreció a su país el primer título de maratón femenino en la historia de los Mundiales (2h27:35).

El decimonoveno puesto de Guevara en el maratón de 1991 es también el mejor resultado de un atleta peruano, entre hombres y mujeres, en un Mundial de atletismo.

Canchanya, de 32 años, disputaba el tercer maratón de su vida, después de haber sido sexta en la ciudad surcoreana y séptima en Rotterdam (Holanda), ambas carreras en 2015.

"He empeorado mi tiempo y mi compañera abandonó. El calor era muy fuerte. Estoy triste porque quería rebajar mi tiempo", admitió Canchanya al término de la prueba.

"Es la primera vez que me mandan al Mundial, una gran experiencia, poder estar aquí contra las kenianas. Quería mejorar mi tiempo", insistió, subrayando que las altas temperaturas y las características de la ruta "con subidas, bajadas, pendientes" no le ayudó a hacer un buen crono.

Su mejor tiempo es de 2 horas, 35 minutos y 41 segundos.

- Otro abandono por lesión -

Por su parte, Hortensia Arzapalo, también de 32 años, disputaba su décimo maratón, habiendo terminado este año en duodécima posición en Rotterdam.

Tuvo que renunciar por un dolor ciático, que le viene poniendo en problemas en los dos últimos años.

"Sentí la lesión en el kilómetro veinte y quería avanzar para llegar a la meta, pero ya estaba empeorando el tiempo y abandoné. Hasta ahora aguantaba el dolor, pero ya no pude aguantar más", dijo a la AFP antes de ponerse a llorar, hundida anímicamente por tener que abandonar.

Con la actuación de Perú en el maratón femenino terminó la participación del país en el Mundial de Pekín, donde de nuevo tuvo una actuación discreta en esta competición.

Los abandonos por lesión han sido la particular maldición peruana en la capital china, ya que antes que Hortensia Arzapalo no pudieron acabar sus pruebas, igualmente por problemas físicos, Abel Villanueva en el maratón masculino y Kimberly García en los 20 kilómetros marcha femeninos.

La otra participante peruana en Pekín-2015, Paola Mautino, quedó eliminada en la ronda clasificatoria del salto de longitud.

FUENTE: AFP