OWINGS MILLS, Maryland, EE.UU. (AP). Ray Rice jugó ocho partidos de postemporada, pero el más recordado es aquél en que corrió 159 yardas para que los Ravens de Baltimore vencieran a los Patriots de Nueva Inglaterra.
En su cuarta temporada, Rice se ha convertido en la principal amenaza de Baltimore en ofensiva. El running back de 1,70 metros (cinco pies, ocho pulgadas) comenzó a ocupar ese papel en su segundo año, cuando tuvo la primera de tres temporadas con más de 1.000 yardas por tierra.
Contra los Patriots en los playoffs de 2009, Rice brindó una actuación magistral desde la primera jugada en que corrió 83 yardas hasta la victoria final por 33-14.
"Si quieres preguntarme si ése fue el mejor recuerdo de mi carrera de la NFL, sí, lo fue", dijo Rice esta semana. "Cuando puedes hacer algo tan especial en un partido de playoffs en el estadio del otro equipo, es enorme. Y eso es algo que atesoraré por el resto de mi vida".
Rice ha terminado en la postemporada cada una de sus cuatro campañas. Esta es la segunda vez en ese período en que Baltimore (13-4) llega hasta el partido por el título de la Americana.
"No voy a decir que ha sido fácil, ha sido difícil todos los años", dijo. "A mí me han malcriado. Estuve en los playoffs y jugué en todos los partidos menos uno, y ése es el Súper Bowl".
Rice es una figura clave en la ofensiva de Baltimore: es el único jugador de la NFL que esta temporada sumó más de 2.000 yardas, con 1.364 en acarreos y 704 en 76 atrapadas.
La defensa de Nueva Inglaterra (14-3) está en el puesto 31 del ranking de la liga, pero igual Baltimore apostará a las carreras de Rice para ganar. Esto le facilitará el juego aéreo al quarterback Joe Flacco y ayudará a mantener en la banca a la prolífica ofensiva de los Patriots.
"Todo el mundo lo dice, si puedes mantener a una ofensiva capaz afuera del campo, eso pone límites al partido", dijo Rice.
FUENTE: Agencia AP