QUITO (AP). Con medio título de la Copa Libertadores en su bolsillo, Liga de Quito no para de hacer soñar a Ecuador que recibió con optimismo y elogios la victoria 4-2 sobre Fluminense, una ventaja que deberá ser aprovechada en el partido decisivo el próximo miércoles en Brasil.
Por Fluminense descontaron Darío Coca y Thiago Neves.
El mítico estadio Maracaná será el escenario donde la próxima semana se definirá quién será el nuevo monarca de América.
"Dos goles de ventaja es medio título. Basta una pizca de jerarquía para ganarlo todo" en Brasil, menciona en su edición del jueves diario El Comercio.
"Liga goleó y acaricia el título", decía el titular de ese rotativo con grandes fotos de festejos de los jugadores y la hinchada.
El Comercio resaltó la "contundencia, entrega y aplicación" que mostró el actual campeón ecuatoriano que había dejado en el camino a tres equipos argentinos (Arsenal, Estudiantes y San Lorenzo) y al América de México.
Todos los diarios del país abrieron sus portadas con grandes titulares y fotografías que registraban la victoria.
"Ambicioso y punzante, Liga fue una máquina desde el principio hasta el fin del primer tiempo", destacó diario La Hora.
El "categórico triunfo albo" da esperanzas al Ecuador de que un equipo local figure entre en los primeros lugares de torneos internacionales.
Los albos "impusieron su ritmo y les dieron un verdadero baile con pasos de samba incluidos a los cariocas", señaló.
"Media Copa", así tituló El Universo. "El equipo albo tiene ya media Copa Libertadores; ahora irá al Maracaná por la otra mitad", añadió.
Calificó al primer tiempo jugado por Liga como una etapa "de ensueño" en el que el equipo mostró "un fútbol agresivo, de buen toque, a ratos avasallador sobre los brasileños".
El bajo rendimiento de Liga para la segunda etapa del partido fue mencionado por la prensa. La sensación que dejó el encuentro en algunos hinchas fue agridulce.
Un primer tiempo brillante, lleno de buenas jugadas y muchos goles frente al contraste de un segundo tiempo donde los jugadores se plantearon con menos orden y menos poder ofensivo.
El partido también posibilitó un récord en recaudación. Más de 42.000 asistentes que coparon el estadio Casa Blanca a 2.850 metros de altura generaron más de 700.000 dólares en taquilla.
FUENTE: Agencia AP