En una noche gris, el Inter Miami venció este jueves 2-0 al Cavalier jamaicano en la ida de los octavos de final de la Copa de Campeones Concacaf, un partido que Lionel Messi vio desde la grada.
El equipo estadounidense dejó una mala imagen ante la falta de Lionel Messi que, por problemas físicos, siguió el juego desde uno de los palcos del Chase Stadium junto a su familia.
El astro argentino sufrió junto al resto del público en una primera mitad en la que el Cavalier dio varios sustos importantes a los pupilos de Javier Mascherano gracias a la velocidad de sus atacantes.
Triunfo sufrido del Inter Miami
El campeón de la Copa del Caribe envió primero una pelota al poste, en un centro de Jalmaro Calvin que rebotó en David Martínez, y justo antes del descanso batió el arco local con un remate de Shaquille Stein tras una falta servida desde la derecha.
El árbitro interrumpió las celebraciones visitantes al revisar la jugada en el VAR. El análisis duró largos minutos que un inquieto Messi vivió levantado de su asiento, pero finalmente el gol fue anulado por fuera de juego.
"Jugamos con fuego y cuando juegas con fuego es muy posible que te quemes", resumió Mascherano en la conferencia de prensa. "Es un partido en que tuvimos suerte. Los tres o cuatro contragolpes que tuvieron no pudieron terminarlos de la mejor manera".
El Inter, que no hizo un solo disparo a puerta en la primera parte, mejoró sus prestaciones tras el descanso.
Allende dio tranquilidad a la grada con el primer gol, en el que se aprovechó de varios rebotes en el área tras un córner, y el 'Pistolero' Suárez agrandó el botín para la vuelta en un contragolpe en el que tuvo espacio para acomodarse la pelota y enviar un zurdazo ajustado al poste.
"Como se dio el partido, terminó siendo un muy buen resultado pero es un aviso de que los partidos son once contra once y nadie te regala nada", advirtió Mascherano.
FUENTE: AFP