En el momento del sorteo, el Benfica se presentaba para muchos como el rival más deseado. El Inter de Milán fue el 'afortunado' pero deberá desconfiar del líder de la liga portuguesa y de su atacante estrella, Gonçalo Ramos, el martes (19h00 GMT) en la ida de los cuartos de final de la Champions League.
Gonçalo Ramos está acostumbrado a la presión. Estuvo en el centro de los focos internacionales durante el Mundial de Catar-2022, cuando el entonces seleccionador Fernando Santos le eligió como titular por delante de Cristiano Ronaldo en el duelo de octavos de final contra Suiza.
Respondió de la mejor manera, con un triplete en la goleada de la Seleçao por 6-1, y muchos se apresuraron a considerarle el heredero natural del todopoderoso CR7, salvando las obvias distancias.
En marzo, el delantero deslumbró contra el Brujas en la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones, marcando un doblete en el triunfo 5-1, que condujo al Benfica a cuartos de final por segunda temporada consecutiva.
La visita del Inter del martes al estadio da Luz es una oportunidad dorada para que Ramos se reivindique en el mayor escenario del fútbol europeo, como ya hicieron otros talentos del Benfica a lo largo de los últimos años.
El último y más relevante fue el centrocampista Enzo Fernández, que fichó en el mercado de enero por el Chelsea por 121 millones de euros (133 millones de dólares), aunque en su caso el gran trampolín fue su rendimiento con la selección de Argentina, con la que ganó el Mundial en Catar el pasado diciembre.
Gonçalo Ramos dio un paso adelante en la jerarquía del Benfica cuando el Liverpool fichó al inicio de la pasada temporada al atacante uruguayo Darwin Núñez por 75 millones de euros (82 millones de dólares).
El ataque del Benfica parecía quedar huérfano, pero allí estaba Ramos (21 años) para cubrir el hueco, después de haber sido el escudero de lujo de Darwin Núñez.
FUENTE: AFP