JUPITER (AP). Giancarlo Stanton llegó al entrenamiento de pretemporada en el mismo Maserati viejo que conducía el año pasado. El auto ni siquiera llevaba una matrícula especial con sus iniciales, como la que solicitan muchas celebridades.
Los Marlins de Miami esperan que ello sea verdad. En noviembre, firmaron un contrato récord por 13 años y 325 millones de dólares con el jardinero estelar, y confían en que su inversión les reditúe el mismo talento que Stanton ha prodigado hasta ahora.
Pero había muchos cambios en el momento en que los Marlins realizaron su primer entrenamiento con el plantel completo en la pretemporada. El número de fanáticos y periodistas era mayor, en buena medida por Stanton pero también por Ichiro Suzuki, adquirido durante el receso entre temporadas.
Suzuki se presentó en el campamento, seguido por su habitual comitiva de reporteros japoneses.
Hay también más expectativas. Aunque los Marlins no llegan a una postemporada desde 2003, las contrataciones han derivado en que muchos peloteros hablen de que pelearán por un título, sin que ello suene ingenuo.
Pero Stanton dudó ante la pregunta de si los Marlins son un equipo digno de los playoffs.
"Sí", respondió, pero añadió de inmediato, "ya veremos... tenemos el calibre y el talento para estar ahí, desde luego. Lo que vamos a hacer en agosto y septiembre dependerá de nosotros".
El pelotero se dijo plenamente recuperado del pelotazo que recibió en septiembre, el cual puso fin a su temporada y lo sacó de la contienda por el premio al Jugador Más Valioso de la Liga Nacional.
Pese a perderse los últimos 17 juegos, encabezó la liga con 17 jonrones, para aumentar a 154 su total de por vida. Y tiene apenas 25 años.
"Él tiene asuntos pendientes, porque antes de ese pelotazo él era mi Jugador Más Valioso", dijo el presidente de operaciones deportivas de los Marlins, Michael Hill. "Esa lesión le privó en cierto modo de esta oportunidad. Y tiene asuntos pendientes con su equipo. Es el rostro de nuestro club y quiere ser nuestro líder".
Ese rostro no presenta señales evidentes del tremendo pelotazo, que le fracturó a Stanton el hueso orbital y le causó daño en cinco piezas dentales. El astro considera que su vista está bien y que no siente ya dolor ni miedo de que le hagan un nuevo lanzamiento.
"Lo que me pasó no figura entre las cosas que deseo superar", dijo. "Simplemente veo esto como un entrenamiento normal de pretemporada".
Sin embargo, Stanton prevé usar un dispositivo que le proteja la mejilla izquierda.
"Siempre y cuando esto no altere mi forma de jugar o de ver las bolas altas o bajas, pienso usarlo", indicó. "Simplemente veremos cómo transcurren los juegos".
Stanton enfrentará a lanzadores por primera ocasión el jueves. El martes, al realizar su práctica de bateo, usó la gorra normal y conectó un jonrón de 450 pies, que dibujó sonrisas en las caras de sus compañeros.
"¡Hombre, este tipo es un monstruo!", exclamó Michael Morse, recién llegado a los Marlins. "He notado todo lo que él hace hasta ahora. Es el mejor... y su carrera apenas comienza. Agradezco estar ahora en su equipo".
FUENTE: STEVEN WINE (Associated Press)