Luka Modric vivió un emotivo homenaje en el Santiago Bernabéu en el que fue que su último partido en dicho estadio. Los compañeros de equipo y la afición madridista despidieron con honores a la leyenda, al jugador más laureado de la historia de los blancos con 28 títulos, que el 22 de mayo anunció que pondrá fin a una etapa inolvidable como jugador del club al término del Mundial de Clubes.
En el minuto 85' cuando el partido estaba 2-0, la afición despidió a Modric con una enorme ovación al ser sustituido por Chema. El extraordinario futbolista croata salió del campo abrazando a varios compañeros y el partido se interrumpió para que tanto el Real Madrid como la Real Sociedad le hicieran pasillo. Ya en el banquillo, se dio un efusivo y cariñoso abrazo con Toni Kroos, que se retiró del fútbol en este mismo escenario la pasada campaña.
Luka Modric: “No hay palabras para agradecer todo lo que me habéis dado"
Al término del encuentro, continuó el homenaje. Tras el visionado de un emotivo vídeo en los videomarcadores del estadio, Modric se dirigió al centro del campo y dijo emocionado: “Ha llegado el momento que nunca quise que llegara. Ha sido un viaje largo, pero maravilloso. Quería dar las gracias al club y al presidente Florentino Pérez. También a todos los entrenadores de estos años, a mis compañeros que me acompañaron en este camino y a la gente que me ayudó en este tiempo. Muchas gracias de corazón. También quiero dar las gracias a mi familia, porque sin ellos todo esto no sería posible”.
“Hemos ganado mucho y ha sido un tiempo maravilloso. He ganado muchos trofeos, pero el más grande es el cariño y el amor que me habéis dado en todos estos años. No hay palabras para agradecer todo lo que me habéis dado estos años. Quiero decir una frase que he visto y que me gusta mucho: 'No llores porque terminó, sonríe porque sucedió'. ¡Hala Madrid y nada más!”.
Posteriormente, fue manteado por la plantilla y dio una inolvidable vuelta de honor al Bernabéu acompañado de su pareja y sus tres hijos. Antes de abandonar el césped, inmortalizó el momento con una foto de familia con sus compañeros y, junto a Ancelotti, caminaron abrazados al centro del campo. Allí fueron ovacionados por un Bernabéu entregado a dos de sus leyendas.
FUENTE: REAL MADRID