FILADELFIA (AP). El mejor récord en el béisbol no le valió de mucho a los Filis de Filadelfia en octubre.
Cada uno de sus tres ases perdió un partido, sus bateadores se desinflaron y su defensa fue irregular.
"Creo que decir que estoy conmocionado es lo correcto", dijo el cerrador Brad Lidge tras el fin del partido del sábado. "No creo creo que alguno de nosotros pensó que esto fuera a ocurrir. Parecía como si tuviéramos el mejor equipo en el béisbol este año... Pero desafortunadamente nos tocó un equipo que parece estar haciendo absolutamente todo bien", agregó.
Los Filis lograron su cuarto título de la División Este de la Liga Nacional consecutivo, encabezaban la liga en triunfos por primera vez en la historia del equipo y barrieron a Cincinnati en la primera ronda de postemporada.
Pero a pesar de tener un gran cuerpo de lanzadores no pudieron superar la falta de bateo ante los sorprendentes Gigantes.
Howard, el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Nacional del año pasado, no pudo conseguir remolcar ni una carrera ante los Gigantes y terminó la serie abanicando en su tercer strike cuando la carrera del empate aguardaba en segunda.
La derrota de Roy Halladay en el primer partido estableció el tono de la serie y tras ella los Filis no se recuperaron.
La ofensiva es en gran parte la responsable pues fue inconsistente durante la temporada y casi desapareció durante los playoffs.
Howard, Chase Utley y sus compañeros no lograron hacerle mucho daño a los lanzadores de los Gigantes. Cada jugador titular, excepto el receptor panameño Carlos Ruiz, tuvo un retroceso en su producción. En parte esto se debió a las lesiones, seis de ocho jugadores titulares pasaron algún momento en la lista de lesionados.
Los Filis dependieron mucho en los jonrones y tuvieron problemas para anotar cuando no consiguieron poner la bola del otro lado de la cerca.
Lograr más carreras podría ser incluso más difícil el próximo año si el jardinero derecho Jayson Werth no se queda con ellos. Werth experimentará como agente libre y lo más probable es que los Filis no le lleguen al precio.
El equipo tiene comprometidos más de 143 millones de dólares con 18 jugadores, eso es más que la nómina completa de esta temporada.
El núcleo del equipo estará de vuelta y los Filis seguramente serán los favoritos para ganar otro título de división. Pero, volviendo a lo principal, ganar la Serie Mundial es lo que le importa a este equipo. Un segundo título en tres años pudo ser suficiente para justificar hablar de una dinastía. Pero ahora tratarán de lograr dos campeonatos en cuatro años.
Con Halladay, Roy Oswalt y Cole Hamels liderando la rotación, los Filis parecen estar listos en cuanto a los lanzadores.
Pero quedarse sin Werth, el único diestro con un bateo potente en una alineación con muchos zurdos, será un problema. Quizá el joven Domonic Brown, otro zurdo, podría reemplazar a Werth o al menos ser parte del pelotón con Ben Francisco o alguien más.
FUENTE: Agencia AP