JOHANNESBURGO (AP). La selección de Nigeria le pidió al gobierno de su país que le proporcione seguridad al mediocampista Sani Kaita, quien se hizo expulsar en el partido que el equipo perdió contra Grecia. La derrota provocó que el jugador recibiese más de un millar de amenazas de muerte en su contra.
"Solo esperamos que el gobierno se tome en serio estas amenazas", dijo Peterside.
El ministro de Deportes de Nigeria Ibrahim Bio está hospedado en el mismo hotel en Sudáfrica y se le ha informado de las amenazas, dijo Peterside.
"Estoy confiado que tomarán medidas al respecto", indicó Peterside. "El ministro nos dijo que estas cosas pasan, que son acciones de hinchas que se toman las cosas muy a pecho y que no debemos preocuparnos".
La seguridad en torno a la concentración del equipo, en Durban, ha sido redoblada, pero Peterside no cree que el equipo afronta una amenaza en Sudáfrica.
"Tenemos suficiente seguridad en Sudáfrica y no estamos preocupados por la seguridad del jugador acá", añadió.
El portavoz de la policía de Sudáfrica, Vishnu Naidoo, señaló que todos los equipos en el Mundial reciben una seguridad adecuada y que no ha recibido informes de amenazas contra el jugador de Nigeria.
Nigeria perdió sus dos primeros partidos y la única vía que tiene para avanzar a la siguiente ronda es si derrota a Corea del Sur por goleada y que Argentina supere a Grecia en el cierre del Grupo B, el martes.
Kaita, cuya ficha pertenece al Mónaco de Francia pero está cedido en préstamo al club ruso Alania Vladikavkaz, podría decidir irse a Europa tras el Mundial en vez de volver a Nigeria.
Según Peterside, Kaita "se disculpó con sus compañeros, y ellos le perdonaron".
"Estamos con buen ánimo para el partido contra Corea del Sur", resaltó.
En el caso más prominente de un jugador que fue objeto de amenazas tras el Mundial, el defensor colombiano Andrés Escobar fue asesinado a balazos tras retornar a su país días después que un autogol suyo precipitó la derrota de Colombia 2-1 ante Estados Unidos en 1994.
FUENTE: Agencia AP