FÚTBOL Fútbol -  6 de febrero de 2014 - 18:43

Violencia acecha al Corinthians

SAO PAULO (AP) — La policía brasileña intervino cuando hinchas del Corinthians trataron de impedir que otros seguidores del club cantaran en el estadio, en el más reciente caso de violencia relacionada con el fútbol en el país sede del Mundial.

Los brasileños quedaron consternados el jueves por imágenes de televisión en las que se ve a policías golpeando con macanas a fanáticos, y un hombre tratando de poner a salvo a una niña, durante el partido del miércoles por el campeonato estatal de Sao Paulo

El incidente se produjo menos de una semana después que barras bravas de Corinthians entraron al centro de entrenamientos del equipo y agarraron por el cuello a un jugador, exigiendo mejores resultados a un plantel que anda de capa caída.

Las imágenes fueron difundidas el mismo día que Corinthians anunció que el criticado delantero Alexandre Pato se va del club porque teme por su seguridad. Otros jugadores podrían seguirle los pasos, y el "Timao" encabeza una iniciativa para detener el torneo paulista con un paro el fin de semana, con la intención de llamar la atención de las autoridades, equipos y organizadores del campeonato.

En la agresión del sábado, las barras bravas dañaron propiedad del club, agredieron a empleados y agarraron por el cuello al delantero peruano Paolo Guerrero. Todo sucedió en el mismo centro de entrenamiento que la selección de Irán utilizará durante la Copa del Mundo en junio.

"El fútbol brasileño atraviesa un momento muy delicado", dijo el ex futbolista y ahora comentarista de televisión, Caio Ribeiro. "Y el mayor problema es que no vemos medidas de los responsables, especialmente de las autoridades. Corremos el riesgo de perder a los fanáticos de verdad, a los que realmente les gusta el fútbol. Ellos no van a volver a los estadios".

Corinthians, campeón del Mundial de Clubes hace apenas dos años, comenzó 2014 con cuatro derrotas al hilo en el campeonato paulista, incluyendo 2-0 ante Bragantino el miércoles.

Las barras bravas, usualmente responsables de gran parte de la violencia en el fútbol en Brasil, decidieron protestar el miércoles guardando silencio en vez de cantar, y algunas personas hasta se taparon la boca con cinta adhesiva.

Pero los fanáticos que no pertenecen a las barras no se unieron a la protesta y empezaron a cantar en apoyo al equipo.

A los líderes de las barras no les gustó eso y empezaron a entrar a las otras secciones del estadio para pedir a los fanáticos normales que se sentaran y guardan silencio.

"Hoy no estamos aquí para aplaudir", dijo uno de los líderes, no identificado, en un video difundido por GloboEsporte.com. "Por favor cooperen y no canten, lo estamos pidiendo amablemente".

No todos los fanáticos cooperaron, y hubo un enfrentamiento cuando la policía llegó para tratar de separar a las barras del público normal.

Los policías utilizaron macanas contra los que resistieron. En las imágenes de televisión se pudo ver a un hombre abrazando a una niña, tratando de evadir a la policía y los hinchas violentos. Un oficial finalmente los sacó del lugar.

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Tales Azzoni está en Twitter como http://twitter.com/tazzoni

FUENTE: TALES AZZONI (Associated Press)

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