LONDRES (AP). El bronce no es oro pero es una medalla al fin. Así se conformó el brasileño César Cielo cuando el sábado quedó tercero en los 50 metros libre de la natación de los Juegos de Londres, en una prueba en la que se presentó como el gran favorito.
El francés Florent Manaudou (21.34) se llevó el metal dorado; el estadounidense Cullen Jones (21.54), el plateado y Cielo, con 27 centésimas menos que el vencedor, se subió también al podio. Su compatriota Bruno Fratus entró quinto, detrás del estadounidense Antonhy Ervin, en la penúltima jornada de la natación en el Centro Acuático.
"No estoy decepcionado, a lo mejor si hubiese salido algo mal estaría triste", dijo Cielo. "Si hubiese cometido algún error podía sentirme decepcionado, pero creo que nadé bien y me superaron otros".
No fue un buen paso el del brasileño por Londres, ya que en los 100 metros estilo libre terminó sexto, cuando en esa prueba es el dueño del récord mundial y había embolsado el bronce en Beijing.
"Cesao", que hace cuatro años le dio a Brasil su primera medalla olímpica en la natación, recordó que en Londres alcanzó un total de tres preseas en su carrera olímpica, una de oro y dos de bronce. A Río de Janeiro 2016 llegará con 29 años "y con ganas de seguir ganando medallas".
"Tres medallas no es poca cosa y la de hoy de todas formas es una medalla", destacó Cielo, quien cuando salió a la piscina puso los dedos sobre su pecho, que estaba cubierto por una toalla blanca, y los movió como si estuviese tocando un piano. Después se persignó, mientras decenas de compatriotas lo alentaban, muchos de ellos vistiendo ropaje verde y amarillo, los colores de la bandera de Brasil.
A la hora de buscar algún atenuante a su inesperado tercer puesto, Cielo dijo que "a lo mejor el cansancio de la competencia (de los 100) me perjudicó".
"Pero no hay duda que el francés hizo la mejor prueba de su vida", destacó Cielo.
FUENTE: Agencia AP
