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La temporada ciclista en Flandes, en alta tensión tras los atentados

La Gante-Wevelgem y la Vuelta a Flandes, clásicas ciclistas que atraerán a muchos espectadores a lo largo de las carreteras flamencas los dos próximos fines de semana, serán objeto de medidas de seguridad excepcionales en una Bélgica marcada por los atentados del martes en Bruselas.

Desde este viernes, en el Gran Premio E3 de Harelbeke (al norte) se han reforzado los dispositivos de seguridad.

"Hemos desplegado un puesto de mando central donde se recopila toda la información por las autoridades competentes para tomar las mejores decisiones en caso de incidente", comunicó el Comité de Organización.

"Ahí recibiremos imágenes de las zonas de salida y llegada, donde la aglomeración de gente es más importante", explicó un policía a AFP.

Las fuerzas del orden también pidieron a los espectadores que no llevaran bolsos o mochilas. Las personas que las lleven son registradas, constató la AFP, mientras centenares de espectadores asistían a la salida de la clásica en Harelbeke.

Estas mismas medidas deberían tomarse el domingo en la Gante-Wevelgem, la clásica de los esprinters, y sobre todo el próximo fin de semana durante la Vuelta a Flandes, una de las grandes citas deportivas en el norte de Bélgica.

El año pasado, según la prensa local, 800.000 personas se aglomeraron en las cunetas del recorrido de 265 kilómetros.

- 12.000 personas en Brujas -

Estos últimos años, muchos eventos deportivos han sido objetivo de atentados.

El maratón de Boston, en abril de 2013, o el partido Francia-Alemania de fútbol, el pasado 13 de noviembre.

Por ello, las autoridades belgas estarán "muy atentas", según el alcalde de Brujas, desde donde sale la Vuelta a Flandes, incluso si la alerta terrorista bajó de 4 a 3 el jueves.

"Eso significa que pensamos que se están preparando atentados en nuestro territorio pero que la amenaza no es inminente", explicó el viernes el ministro del Interior belga Jan Jambon a la prensa local.

El domingo 3 de abril, 12.000 personas se presentarán en la Gran Plaza de Brujas para asistir a la salida de la Vuelta a Flandes.

Una plaza a la que únicamente se puede acceder por unas calles estrechas de la 'Venecia del Norte'. Será donde se sitúe la vigilancia policial.

Se usarán perros policía especialistas en detectar explosivos.

"Se establecerán 16 zonas de seguridad, explicó el gobernador de Flandes Oriental, Jan Briers. "En estas zonas, estará prohibido llevar mochilas, como ya ha ocurrido en algunos eventos deportivos y culturales. El número de policías desplegados será importante, pero las cifras exactas, lógicamente, no las daremos", añadió el político.

- "Sin pensar mucho en ello" -

"También se impondrá una zona de exclusión aérea en toda la ronda. Sólo los helicópteros encargados de la radiodifusión y los de la policía federal podrán acceder al espacio aéreo sobre la caravana de la carrera", continuó Briers.

Cerca de cuarenta motoristas se encargarán de la seguridad de los ciclistas durante la carrera, mientras que los policías locales de las comunidades por las que pasa el recorrido mantendrán el orden a lo largo de las carreteras.

Se le ha pedido a los auxiliares y los señalizadores que estén atentos a comportamientos "anormales", explicó un comisario de la carrera a la AFP.

"Desplegaremos personal de seguridad en las zonas donde se agrupe más gente, como el Oude Kwaremont o el Paterberg (lugares clave de la carrera)", indicó este viernes la organización de la Vuelta a Flandes.

Los corredores, por su parte, están centrados en competir como demostraron los últimos días, sobre todo en la prueba ciclista A través de Flandes, disputada el miércoles, un día después de los atentados.

"No pensamos mucho en ello. Incluso después de los atentados, la gente volvía a la oficina o a la fábrica. Nosotros debemos trabajar y si podemos dar una pequeña alegría a los belgas", afirmó el ciclista local Jens Debusschere, que se impuso en la carrera del miércoles.

FUENTE: AFP