ROMA (AP). El calcio italiano consignará el domingo la corona al Inter o a la Roma, en una final digna de la mejor película de misterio.
Los dos equipos disputarán la 38va y última jornada futbolística fuera de casa, y sus tifosi, por razones de seguridad, no podrán asistir.
Ambos se enfrentarán a adversarios que requieren con desesperación una victoria para no descender a la Serie B. Livorno ya descendió, con 30 puntos, y otros dos le seguirán entre Empoli (33), Parma (34) y Catania (36).
Inter se medirá con una escuadra que despidió a su técnico, el argentino Héctor Cúper, pocos días antes del duelo final y definitivo. Según su presidente, Tommaso Ghirardi, fue para darle un "remezón" al plantel.
Roma llegará a Catania con un punto menos y un empate en puntos beneficiaría al Inter, por los mejores resultados en los duelos directos. El equipo de la capital posiblemente tiene la moral más alta porque se acercó a un punto después de haber estado a 11 de distancia.
Inter, en cambio, perdió dos grandes ocasiones de ceñirse la corona cuando le bastaba un triunfo, pero perdió con el Milan (2-1) y empató con el Siena (2-2).
El técnico de la selección italiana Roberto Donadoni se equilibra como en una cuerda floja cuando la Gazzetta dello Sport le pidió un pronóstico.
"Es un desafío que se podría haber imaginado Machiavelli, un punto de ventaja es tanto, con un potencial de primer nivel como el del Inter, que tiene los jugadores más fuertes, aunque la Roma tiene un mejor calcio", afirmó.
El veterano técnico que sacó campeón a Italia en el Mundial de España de 1982, Enzo Bearzot, fue más temerario y aventuró una opinión clara: "Inter será campeón porque tiene un punto más y el Parma no está atravesando por un gran momento".
Roberto Mancini, entrenador del Inter, está haciendo todo lo posible para contar con el atacante Zlatan Ibrahimovic, que no juega por lesión desde el 29 de marzo.
Lo más probable es que juegue una parte del encuentro porque no está en condiciones de hacerlo los 90 minutos y en ese caso se presentaría con un ataque formado por el argentino Julio Ricardo Cruz y el jugador de 17 años, Mario Balotelli, llamado por sus admiradores "Súpermario".
En la banca estarán otros delanteros de fuste como el hondureño David Suazo y el argentino de mil batallas, Hernán Crespo.
Será un scudetto de oro para sus jugadores: los del Inter recibirán, cada uno, 380.000 dólares en caso de un triunfo, mientras los de la Roma se "conformarán" con un poco menos, 310.000, según la Gazzetta.
Estos deberían ser los once titulares del Inter: Julio César al arco, Maicon, Nicolás Burdisso, Marco Materazzi y Maxwell en la defensa; Patrick Vieira, Javier Zanetti y Dejan Stankovic en el centro campo, Luis Jiménez en una posición más avanzada y en el ataque Cruz y Balotelli.
La Roma, por su parte, con Doni; Christian Panucci, Philippe Mexes, Juan y Max Tonetto; Daniele De Rossi, David Pizarro, Simone Perrotta, Alberto Aquilani y Mancini; con Mirko Vucinic como única punta.
Además de decidirse el scudetto y el descenso, se adjudicará el último boleto para la Liga de Campeones, por el cual están peleando Fiorentina, que es cuarto con 63 puntos, que irá a jugar con el Torino, y el Milan con 61, que recibirá al Udinese.
Inter y Roma ya se clasificaron para el campeonato europeo y también Juventus, que es tercero con 71 puntos, que entrará a la fase de clasificación.
La última y decisiva fecha se inicia el sábado con Sampdoria y Juventus. Todos los otros se jugarán el domingo: Atalanta-Genoa, Cagliari-Reggina, Empoli-Livorno, Lazio-Napoli y Siena-Palermo.
FUENTE: Agencia AP