GINEBRA, Suiza (AP). La autoridades de Suiza convirtieron parte de una gigantesco centro de convenciones en una prisión para alojar a los hinchas que provoquen desmanes en la Eurocopa.
"Tienen que hacer algo mal para entrar ahí", explicó el jueves el portavoz policial Jean-Philippe Brandt.
En el mundial que organizó su vecino Alemania en 2006, se reportaron 7.000 ofensas a la autoridad, 9.000 arrestos y detenciones temporarias. Las autoridades suizas están preparadas por si los problemas aparecen.
El presupuesto de seguridad en esta sede alcanza los 61 millones de dólares, incluidos los fondos para traer refuerzos policiales de Alemania y Francia si fueran necesarios.
El costo exacto de la cárcel para "hooligans" no fue difundido, pero según Brandt fue de "cientos de miles" de euros.
Obscuras y sombrías son las celdas, que no tienen ventanas pero sí una pequeña abertura en la parte posterior donde una cámara de la policía vigila las 24 horas.
Fuera de ellas, hay duchas, baños, mesas y hornos microondas. Al final de la fila de celdas, hay un área religiosa improvisada, con una Biblia, el Coran y una Tora en varios idiomas.
Los detenidos no podrán permanecer más de 24 horas en las celdas. Cumplido ese plazo, serán deportados a sus países o sometidos a juicio en Suiza si el delito fuera de gravedad.
Lo primero no será problema porque el centro de convenciones está cerca del aeropuerto internacional de Ginebra. "Tenemos los aviones justo aquí, es fácil, sin problemas. Sólo decimos adiós", ironizó Brandt.
La base de datos federal de Suiza tiene 320 nombres de hooligans suizos, mientras que unos 6.000 están registrados como de alto riesgo.
Aquellos hinchas suizos que se porten mal, también irán a la prisión "hooligan".
FUENTE: Agencia AP