BUENOS AIRES (AP). Juan Román Riquelme dijo que "es un invento" que tenga celos de Lionel Messi porque la principal autoridad del balompié argentino le habría pedido que sea líder de la selección argentina, dentro y fuera de la cancha.
Riquelme, cerebro de Boca Juniors y la selección, subrayó en la noche del martes que esas versiones surgen "porque no le caigo bien a mucha gente".
Los diarios del miércoles coinciden en destacar que tras el empate del domingo 1-1 ante Ecuador en Buenos Aires, Grondona, presidente de la Asociación del Fútbol Argentino entró al vestuario y le habría dicho a Messi: "Este equipo es tuyo; vos tenés que ser el líder'"'.
Riquelme, quien en Boca hace y deshace a su antojo, habría escuchado esas palabras y su ego no las digirió.
"¡Vine de paseo y tengo que desmentir pavadas (tonteras) que no existieron!", dijo Grondona en Belo Horizonte, según el deportivo Olé.
Las versiones coinciden en que ya vendrían de antes los problemas entre Riquelme y Messi, figura del Barcelona de España y entre los tres mejores jugadores del mundo, según la FIFA.
¿Messi tuvo ganas de irse de la concentración porque dice que no soporta el aire Maradoniano de Román?", se pregunta Olé, que además se hace eco de rumores que dicen que a Riquelme "no saben a quien ponerle de compañero de pieza".
La Nación afirma que Messi, en la concentración de los argentinos, "habría caído en un pozo de angustia por los destratos que habría acusado recibir" del jugador de Boca.
"No aguanto más a Riquelme", habría suspirado Messi, casi al borde de la exasperación", señala ese diario.
Según Clarín, los presuntos desplantes de Riquelme hacia Messi habrían molestado a otro líder de la selección Juan Sebastián Verón, quien "decidió no viajar junto con el grupo" a Belo Horizonte, a pasar de que estaba descartado para jugar por una lesión.
Martín Demichelis, suspendido, y Esteban Cambiasso, lesionado, igualmente viajaron con la delegación.
Lo que se sabe: Verón y Riquelme se respetan pero no son amigos. Verón estaría más cerca de Messi que de Riquelme. Messi siempre fue una debilidad de Grondona. Y Messi no lo puede ver a Riquelme.
FUENTE: Agencia AP