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A tres meses del Mundial, Rio acelera la pacificación de las favelas

A tres meses de la Copa del Mundo, las autoridades brasileñas ocuparán esta semana una nueva favela en Rio de Janeiro, que vive una guerra entre bandas rivales, y estudian enviar Fuerzas Armadas a otros barrios pacificados donde el crimen organizado revive.

La policía ocupará la madrugada del jueves la favela Vila Kennedy, al oeste de Rio, una de las más violentas y donde viven unas 100.000 personas.

Las ocupación es parte del programa de pacificación de favelas de Rio, y será comandada por tropas de élite del BOPE, el batallón de choque de la policía militar local, que instalará la Unidad de Policía Pacificadora (UPP) número 38, de un total de cuarenta que el estado pretende cumplir hasta el Mundial que se inicia el 12 junio.

La policía interviene la favela en un momento de gran tensión debido al enfrentamiento de bandas de narcotraficantes rivales que disputan el control de Vila Kennedy, desde hace más de un mes y que ha sembrado el pánico en la población.

Vila Kennedy es un gran conjunto viviendas inaugurado hace 50 años, cuando los habitantes de la favelas de la región del estadio de fútbol Maracana y de Botafogo (sur) fueron desplazados de esas áreas.

El gobierno de Rio de Janeiro se embarcó desde 2008 en una campaña de seguridad pública de cara a la Copa del Mundo (del 12 de junio al 13 de julio) y los Juegos Olímpicos de 2016.

Las autoridades han "reconquistado", numerosas favelas, particularmente en los barrios del turístico sur de la ciudad, tomándolas del comando de los narcotraficantes que durante décadas impusieron su ley. La policía instaló unidades de pacificación en las favelas ocupadas.

Pero en las últimas semanas, la situación se ha deteriorado y se ha constatado una reactivación del crimen organizado.

Desde enero, 16 policías fueron asesinados y el 6 de marzo un policía fue abatido en Nova Brasilia, una de las favelas del Complexo do Alemao (norte), conquistada por las autoridades en 2010 en una vasta operación que contó con más de 2.000 efectivos y vehículos blindados.

- "Nada nos parará" -

El secretario de Seguridad de Rio de Janeiro, José Mariano Beltrame, anunció que las Fuerzas Armadas podrían ocupar ciertas favelas ya pacificadas donde los traficantes resisten, como la Rocinha y Pavao Pavaozinho, junto a los barrios turísticos del sur de la ciudad.

"Podemos llamar a las instituciones, Marina, Ejército, Aviación, la Policía Federal. Vamos a continuar este proceso de pacificación, y nada nos detendrá. Si vemos que necesitamos algo más fuerte en las ocupaciones (de las favelas), iremos adelante", dijo Beltrame en una entrevista el domingo al diario O Globo.

El ministro de Defensa, Celso Amorim, dijo el martes en una entrevista con corresponsales extranjeros que no ha habido por el momento ningún pedido oficial para que las Fuerzas Armadas puedan actuar en favelas de Rio de Janeiro.

Amorim afirmó que la decisión pasaría por la presidenta Dilma Rousseff, aunque recordó que ese tipo de acción de las Fuerzas Armadas "tiene un carácter excepcional", como fue el caso de la ocupación del Complexo do Alemao en 2010, donde la situación era "muy grave".

Las policías de Rio de Janeiro lanzaron una gran ofensiva en febrero para frenar a los traficantes. El lunes, ocho sospechosos fueron detenidos en el Complexo do Alemao, entre estos un agente de seguridad del teleférico, de la favela, acusado de estar al servicio del crimen organizado.

La pacificación de Vila Kennedy fue anticipada y con ello ocurrirá antes que la del Complexo da Maré, un conjunto de favelas, cercana al aeropuerto internacional.

Con Vila Kennedy, más de 9.000 policías habrán sido implantados en 253 favelas, donde viven 1,5 millones de personas.

En seis años, los homicidios cayeron 65% en las favelas pacificadas y 48% en la metrópoli.

FUENTE: AFP