BEIJING (AP). La medalla se le fue por poco a la colombiana María Luisa Calle y todo fue por culpa de sus piernas.
Calle, ganadora del bronce en la misma prueba hace cuatro años en Atenas, terminó cuarta en Beijing.
Su técnico José Julián Velásquez reiteró la explicación realista. "Buscamos la fuga, intentamos la vuelta, ganar la carrera por recorrido y no pudimos. María Luisa fue una corredoda combativa; la buscó pero en las últimas dos vueltas no tuvo la fuerza, ni el aire para estar en el embalaje final".
Con breves palabras la colombiana dijo que el resultado "no fue una decepción", al considerar que "casi toda la carrera estuve para medalla" y que el cuarto puesto le demostró que a pesar de sus 39 años, aún puede dar la pelea.
Calle ganó el tercer sprint con una escapada imposible para sus rivales, luego repitió en el sexto y en otros dos también sumó puntos para un total de 13, al igual que la española Leire Olaberria.
No obstante, la ibérica ingresó antes que la colombiana en el cierre del sprint final, lo que la dejó con el bronce.
Calle reconoció que la preparación a los Juegos estuvo muy centrada en su especialidad: la persecución individual, donde el viernes no logró obtener un buen resultado al quedar en el décimo puesto.
En esa categoría ostenta medallas en copas mundiales desde el 2005, pero en olímpicos no se le ha dado.
"La culpa del décimo lugar es mía", manifestó Velásquez, quien realizó cambios que admitió como "drásticos" en la estrategia. "Esos cambios, de haber resultado, nos habrían enviado adelante", añadió, al afirmar que no es el final del camino para la ciclista.
"Ella tiene gran amor por la persecución individual, va a seguir intentando llegar a un podio", apuntó el técnico, quien consideró que "un cuarto lugar no puede ser catalogado como un desastre" debido a que en este tipo de carreras "no siempre gana la mejor".
Indicó que la colombiana reiniciará el martes sus entrenamientos.
"No sé decir si estará en los próximos Olímpicos, pero al 2012 estoy seguro que estará activa", afirmó.
FUENTE: Agencia AP