NUEVA YORK (AP). Durante una escena de "Los Dos Escobar", Francisco Maturana trata de justificar una visita de los jugadores de la selección de Colombia a la cárcel donde el extinto Pablo Escobar permanecía detenido.
Tal era la disyuntiva que rodeaba al equipo, y que hace 16 años se presentó a la Copa Mundial de Estados Unidos bajo la euforia de figurar entre los candidatos al título.
La euforia, sin embargo, terminó en la tragedia de Andrés Escobar, el defensa central de la selección que marcó un autogol en la derrota ante Estados Unidos y que precipitó la prematura eliminación. A pocos días de volver a Colombia, Escobar era ultimado a balazos a las afueras de una discoteca en Medellín.
"Los Dos Escobar" ofrece una nueva visión sobre el llamado "narcofútbol", los vínculos del narcotráfico en el fuerte despunte del fútbol colombiano a fines de los 80.
La historia entrelaza las vidas de dos hombres que compartían el mismo apellido. Uno es Andrés, quien desde 1987 había sido titular indiscutido de la selección y estaba a punto de pasar el Milan de Italia. El otro es Pablo, el temido jefe del cartel de Medellín que en diciembre de 1993 fue abatido a balazos mientras huía de la policía.
Objeto de buenas críticas, el documental realizado por los hermanos Jeff y Michael Zimbalist fue estrenado durante el reciente festival de cine Tribeca en Nueva York y ahora tendrá su presentación internacional en el de Cannes.
"Es una historia que permite entender las ramificaciones que tuvo el narcofútbol", dijo Jeff. "Hay dos caras de la moneda.
"No es sólo sobre un error en el campo de juego. La muerte de Andrés es la punta del iceberg dentro de una cadena de episodios trágicos de la historia de Colombia", añadió Michael.
Ambos hermanos se encontraron con el proyecto por casualidad mientras realizaban otro trabajo en Colombia.
La cadena ESPN les propuso la idea de hacer un documental sobre Andrés Escobar como parte de una serie de nueve sobre diversos temas.
En el curso de 100 minutos, los hermanos Zimbalist presentan un amplio abanico de relatos que incluyen a los familiares de Andrés Escobar, el ex presidente colombiano César Gaviria (1991-1994), las principales figuras de la selección y hasta el jefe de sicarios de Pablo Escobar.
El lugarteniente es Jhon Jairo Velásquez, 'Popeye', quien desde la cárcel describe un episodio cuando Pablo Escobar era perseguido por las fuerzas de seguridad en parajes rurales y se entretenía escuchando por radio las narraciones de los partidos de la selección nacional.
"El fútbol era su pasión, era su placebo", dice Velásquez.
Y a partir de ahí el documental plantea la influencia que tuvo el narcotráfico en el fútbol colombiano, en el que los jefes de los carteles pasaron a ser propietarios de clubes y con ello el auge de la selección.
También describe las amenazas de muerte recibidas por la selección en pleno Mundial de Estados Unidos, supuestamente por parte de apostadores.
"Han pasado tantos años y este documental lo que hace es repasar ambas caras de la moneda", dijo Jeff. "Son episodios que no se han olvidado fácilmente.
Por el asesinato de Escobar sólo fue condenado el hombre que disparó el arma y no así los que al parecer le dieron la orden.
"En el caso de Andrés Escobar hay que mencionar que sigue siendo un símbolo en Colombia, y que dejó un legado. Era un individuo que en vida se resistió a verse involucrado en el narcofútbol. Tenía unos principios morales y una visión de que el fútbol podía transformar la imagen de su país".
En Estados Unidos, el documental será presentado en pleno Mundial de Sudáfrica, el 21 y 22 de junio en ESPN. Aún no se han pautado fechas para su difusión internacional.
FUENTE: Agencia AP