LONDRES (AP). El brasileño Eduardo da Silva recibió el martes una de las mayores ovaciones que se le han brindado en su carrera, por parte de los aficionados del equipo contrario.
Eduardo cumplió la promesa que hizo antes del encuentro, de no celebrar en caso de hacer un gol a los Gunners, lo que le ganó incluso más el aprecio de los hinchas que lo apoyaron durante su recuperación, tras una lesión que pudo haber puesto fin a su carrera, en febrero del 2008.
Los espectadores en el Emirates Stadium se pusieron de pie para ovacionar el gol. Muchos corearon el nombre del brasileño, quien les respondió dirigiendo aplausos hacia los cuatro costados del inmueble ubicado en el norte de Londres, luego del silbatazo final.
"Si hubiéramos deseado que alguien hiciera un gol por el Shakhtar Donetsk, ese alguien es Eduardo", dijo el técnico del Arsenal, Arsene Wenger.
El gol recordó las actuaciones que los aficionados del Arsenal esperaban ver regularmente de parte del delantero brasileño cuando fue fichado, procedente del Dynamo de Zagreb en julio del 2007. Aquella contratación ascendió a 7,5 millones de libras (11,7 millones de dólares).
Anotó 12 tantos en 31 partidos, antes de fracturarse una pierna y dislocarse un tobillo durante un empate a 2 ante el Birmingham, en la Liga Premier. Regresó con tres goles en cuatro partido hacia el final de la campaña siguiente, pero tuvo problemas para recuperar su forma después de la inactividad de un año.
Eduardo añadió siete goles a su cuenta la temporada pasada, pero pasó 12 partidos sin anotar, antes de que Wenger le permitiera fichar en julio por el Shakhtar, con un contrato por cuatro años.
FUENTE: Agencia AP
