La selección de Egipto dio al menos algo qué aplaudir y, como era de esperarse, la estrella Mohammed Salah tuvo un papel importante en eso
También fue la primera victoria de Egipto en cerca de un año. La última vez que la selección egipcia se había apuntado un triunfo en un partido oficial fue en octubre, cuando Salah, atacante estelar del club Liverpool inglés, anotó en tiempo de reposición ante la República del Congo en una victoria por 2-1 que aseguró a Egipto su regreso a un Mundial por primera vez desde 1990.
Salah falló un par de penales, pero compensó con dos goles y dos pases en otras dos anotaciones. Y si bien eso es lo que se espera de un jugador que conformó la terna final por el premio al Mejor del Año de la FIFA, lo que causó sorpresa el sábado fue el nuevo enfoque de la selección bajo el mando de su nuevo técnico, Javier Aguirre.
Al deshacerse de la estrategia cautelosa de su predecesor, el argentino Héctor Cúper, Aguirre parece favorecer más un fútbol ofensivo y de presión que fue exhibido plenamente el sábado por la noche frente a Níger.
El mexicano también optó por inyectar nueva sangre al equipo, dando a varios jóvenes una primera oportunidad con la selección.
FUENTE: AP