BUDAPEST (AP). Tres futbolistas y cuatro árbitros han sido detenidos en Hungría dentro de una investigación internacional sobre arreglo de partidos.
Los partidos bajo sospecha involucran a selecciones internacionales tanto a nivel mayor como juvenil, además de duelos en las ligas de Hungría y Finlandia.
Se sospecha que una mafia internacional podría haber pagado entre 40.000 y 85.000 euros (57.600 y 122.400 dólares) por partido para poder alterar el resultado. Se calcula que la banda pudo embolsarse hasta 600.000 euros (864.000 dólares) en apuestas que ganaron.
Medias húngaros informaron que el retirado futbolista Zoltan Kenesei era el supuesto líder de la rama húngara de la mafia de apostadores, que sería dirigida por "alguien en el Lejano Oriente".
Otros que presuntamente fueron detenidos son los árbitros Kolos Lengyel, Krisztian Selmeczi y Janos Csak, quienes fueron suspendidos este año por la federación húngara de fútbol por haber dirigido sin permiso un partido entre Estonia y Bulgaria. Ese partido terminó 2-2 con los cuatro goles anotados mediante penales.
Un partido bajo investigación fue la victoria 1-0 de la selección Sub20 de Argentina ante Bolivia.
FUENTE: Agencia AP