El contrato de Lionel Messi con el FC Barcelona venció este jueves (desde las 00:00 hora de España) y, por primera vez desde que es jugador azulgrana, el argentino se encuentra en una situación de libertad, completamente desconocida para él. Así, por ejemplo, cuando el sábado Argentina se mida ante Ecuador por los cuartos de final de la Copa América, el delantero, de 34 años, saltará al campo de juego como agente libre.
El hecho concreto del final del convenio no le pone fin a las tratativas, pero es un símbolo estruendoso de que el reloj corre, para ambas partes, pero sobre todo, para una: el Barcelona. De hecho, los medios españoles subrayan la situación en su portada, como sucede con Marca, de Madrid. “Esta noche queda libre”, tituló.
Fuentes consultadas por SPORT aseguraron que en la agenda del FC Barcelona no hay previsión alguna de cuándo podría resolverse la actual situación, aunque no se descarta tampoco que el acuerdo sea inminente. La entidad azulgrana, en cualquier caso, presiona para que el anuncio, tan esperado por la afición, no se demore por más tiempo.
En el medio, hay oferentes que esperan agazapados, como el PSG, que a través de sus directivos supo hacer público su interés por contar con Lionel Messi. Mientras tanto, el capitán hoy tiene puesto el chip de la selección albiceleste, buscando ganar su primer título a nivel mayores y romper la sequía del combinado argentino, que lleva 28 años sin vueltas olímpicas (desde la Copa América de 1993). Y, más allá de que su futuro lo mantiene cerca del Barcelona, se dará una situación por demás peculiar: el seis veces ganador del Balón de Oro, uno de las dos estrellas que dominaron la escena del fútbol en el siglo XXI, pasará a jugar algunos partidos en condición de agente libre.
Lionel Messi anunció su último acuerdo con el FC Barcelona el 5 de julio de 2017 y lo firmó el 25 de noviembre. Entonces, se comprometió hasta hoy, 30 de junio de 2021, siendo su cláusula de 700 millones de euros, la más elevada que ha tenido como jugador barcelonista. Hasta entonces, la libertad del crack se había valorado en un máximo de 250 millones.