Con la selección general Nro. 17 en el Draft de MLB del 2023, los Orioles de Baltimore eligieron en la primera ronda al jardinero de Vanderbilt, Enrique Bradfield Jr.
Su padre jugó en los torneos nacionales en Panamá, por eso tiene sangre panameña y en muchos medios se habló de la firma de este jugador.
El ex jardinero central de los Commodores es más conocido por su velocidad de 80 grados y su fildeo de 70 grados, un par de herramientas que llamaron la atención del gerente general Mike Elias cuando observó a Bradfield en videos.
Un bateador de .311 en tres temporadas en Vanderbilt, Bradfield estableció el récord del programa de bases robadas en su carrera a principios de su campaña junior. Utilizando su gran velocidad y sus instintos naturales, Bradfield se robó 130 sacos en total, incluyendo una marca de 46-46 como jugador de segundo año. No tenía miedo de tomar boletos para potenciar sus destrezas corriendo las bases, recibiendo bases por bolas casi el 15 por ciento del tiempo para redondear un OBP de .426 en la universidad.
La velocidad y las habilidades atléticas de Bradfield le han valido comparaciones con el seis veces All-Star y cuatro veces ganador del Guante de Oro Kenny Lofton. Bradfield puede patrullar el outfield como pocos, compensando lo que se califica como un brazo promedio con una velocidad élite que le da un alcance significativo en el center field.
Dada su delgada estatura (1,88 metros, 77 kilos), Bradfield no posee mucho poder al bate. Sin embargo, pasó de un jonrón en su primer año en la universidad a un total de 14 en 124 juegos en sus temporadas segundo año y junior, lo que significa que tiene suficiente fuerza para poner a pensar a los lanzadores rivales. Capaz de tocar para embasarse, Bradfield es una amenaza de varias maneras diferentes en el plato y especialmente en las almohadillas.