El astro Lionel Messi y sus compañeros de la Selección partieron con su más preciado tesoro, la Copa del Mundo, hacia Argentina, donde millones de compatriotas emocionados los esperan para darles un recibimiento de héroes, en medio de festejos que no cesan.
Apenas terminó la tanda de penales, en la que Argentina se impuso a Francia por penales (4-2) después de que los 90 minutos (2-2) y la prolongación (3-3) terminaran en empate, millones de personas se lanzaron a las calles de Buenos Aires y las demás ciudades argentinas para celebrar la tercera copa de este país, apasionado del fútbol.
Lionel Messi coronó así su brillante carrera con el único trofeo que hasta ahora le había resultado esquivo.
"Esto comienza hoy (domingo) y no terminará mañana (lunes) porque mañana recién llegan. Seguiremos un poco más. Tenemos planeado ir a recibirlos al aeropuerto de Ezeiza y después haremos caravana por donde ellos estén pasando", aeguró a la AFP en medio de la fiesta Verónica Silva, una docente de 44 años.